Ayer lunes, Fibra Uno (FUNO) anunció el cierre de la adquisición de un edificio de oficinas Clase A+ con 72,000 metros cuadrados de área rentable bruta (ARB), localizado en el distrito corporativo Corredor Reforma en la Ciudad de México, con una inversión total de P$3,372 millones (US$180 millones). La transacción representa el 1% y el 9% del ARB consolidada y de oficinas del 1T16, respectivamente.
El proyecto, conocido como Torre Cuarzo, se encuentra actualmente en la etapa final de desarrollo y se espera su entrega en el 2T17, con un periodo de estabilización de 24 meses a partir de esa fecha. FUNO estima que la adquisición generará una utilidad operativa neta (NOI, por sus siglas en inglés) estabilizada de P$317 millones (US$17 millones, equivalente a una tasa de capitalización estabilizada de 9.4%).
La adquisición será financiada con P$1,240 millones en efectivo (37% del total) y el resto con acciones (Certificados Bursátiles Fiduciarios Inmobiliarios, o CBCFI) de FUNO que serán distribuidas en 3 tramos: abril, mayo y septiembre de 2017.
Principales conclusiones: Aunque la adquisición añade la exposición de FUNO a un posible exceso de oferta en el corredor Reforma, creemos que se trata de una exposición relativamente pequeña para FUNO. Asimismo, este activo no sólo se adquirió a una atractiva tasa de capitalización, sino que además ofrece potencial de convertirse en un edificio de referencia en el creciente submercado de oficinas cercanas al Centro Histórico de la Ciudad de México. Por último, nos agrada que FUNO continúe con su programa de adquisiciones en un momento en el que las grandes adquisiciones de propiedades (superiores a los US$100 millones) parecen escasas, complejas de negociar, y/o caras.
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